Una montaña de ropa en el desierto de Atacama

Una montaña de ropa en el desierto de Atacama

Es probable que alguna vez te hayas preguntado que daño puedes hacerle al planeta si compras una prenda de algún gigante del “fast fashion”, puedes pensar que si compras una prenda y le das los debidos cuidados y extiendes al máximo su vida útil estarás minimizando el impacto que tiene esa prenda de ropa que compraste.

La realidad es que al comprar una de estas prendas estas alimentando un negocio multimillonario que genera una gran cantidad de contaminación y residuos que al final son mal gestionados y generan más contaminación aparte de la que ya generaron al ser producidas.

La ONU reporto que la producción de ropa entre el 2004 y 2019 se duplico, y que cada segundo se quema el equivalente de un camión de basura repleto de ropa. En Chile se viven las consecuencias de la producción descontrolada de estos gigantes de la moda alimentados por el consumismo, desde hace 15 años todos los desechos textiles (ropa de segunda mano o que no ha sido vendida) se vierten en el Desierto de Atacama.

Montañas de ropa que cubren un área de más de 300 hectáreas (el equivalente a 420 canchas de futbol) han convertido el Desierto de Atacama en un “Desierto de ropa”. Las consecuencias de esta terrible practica va más allá de la contaminación generada y los recursos utilizados para producir esta gran cantidad de prendas, estas pilas de nylon una encima de otras es calentadas por el sol y erosionadas por el viento y se reparte en el aire a lo largo del tiempo.

Adicionalmente, muchas de estas prendas están fabricadas a partir de poliéster que al ser sometidos a altas temperaturas y un ambiente seco como el de un desierto, ocasiona grandes incendios que duran semanas en ser mitigados, causando una gran cantidad de contaminación en el aire que respiran las comunidades aledañas.

En Madre Tierra buscamos informar acerca de estas problemáticas que están afectando a muchas comunidades hoy en día y tratar de motivar a las personas a ser agente de cambio. Como puedes pensar, talvez no tengamos ni el poder ni la posibilidad de resolver esta problemática en concreto, pero sí que podemos ayudar evitando apoyar a estas grandes empresas y haciendo de esto un tema de interés social para ejercer presión y motivar una acción que genere cambio.

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